El PP defiende el derecho de todos los lorquinos para conformar sus Juntas Vecinales como herramienta de autogestión frente al caos económico del actual alcalde
La concejal de Participación Ciudadana en el ayuntamiento de Lorca por el Partido Popular, Mari Huertas García ha informado que los lorquinos quieren tener la oportunidad que ya disfrutan los vecinos de grandes ciudades españolas, y desarrollar el sistema de participación ciudadana que funciona en Murcia y Cartagena, porque no se fían del uso que el actual alcalde está haciendo del dinero público. Y nosotros apoyamos esta pretensión. Estamos hablando de una autogestión económica por parte de los vecinos de cada uno de nuestros barrios y pedanías, que quieren materializar ya el derecho que les ampara legalmente para comenzar a trabajar desde sus respectivas Juntas Vecinales.
El Sr. Mateos ha construido un auténtico muro entre los ciudadanos y la alcaldía. Ha adquirido la insana costumbre de no atender a la gente, y el sentimiento de abandono se ha generalizado en nuestro municipio.
A nosotros no nos extraña en absoluto que los vecinos se sientan ciertamente decepcionados por la pésima gestión que el alcalde de Pedro Sánchez está realizando con el dinero de nuestros impuestos. Es evidente que actuaciones como la de gastarse 800.000 euros en coches, 500.000 en rescatar Limusa porque la ha arruinado en menos de un año, o los cinco millones de euros que se ha gastado en apenas unos meses, han provocado que los lorquinos quieran participar directamente de las decisiones que les afectan más de cerca. Y es que la gente se siente engañada porque el Sr. Mateos les ha subido los impuestos, vaciando los bolsillos de los ciudadanos, pero ni ha mejorado los servicios municipales, ni esto «vuelve a brillar», más bien al contrario.
La realidad es que Lorca, sus barrios y sus pedanías, están ahora peor que hace un año y medio. La degradación del municipio es evidente, con ejemplos particularmente duros, las calles están más sucias que nunca por culpa de la pésima gestión política en Limusa, y, encima, el Sr. Mateos ha retirado unilateralmente a la policía local de todas las pedanías, generando una situación de inseguridad y desprotección que constituye una irresponsabilidad gravísima.
En resumen, la gente ve que paga más impuestos que nunca, pero recibe peor servicio y atención, por lo que reclaman su derecho a participar de forma directa en la administración del dinero de sus impuestos, y eso es precisamente lo que nosotros también queremos, y por eso exigiremos en el próximo pleno del Ayuntamiento que se habilite de inmediato, mediante la modificación presupuestaria pertinente, así como en el Presupuesto Municipal para el este año la partida legalmente establecida para la puesta en marcha de las Juntas Vecinales, es decir, dos millones de euros que tienen que quedar en manos de los propios vecinos para su autogestión.
Mari Huertas García ha anunciado, además, que el PP rechaza cualquier intento de control por parte del actual alcalde a la hora de elegir qué pedanías y barrios tendrán este sistema de participación y cuáles no. Eso sería pervertir la participación ciudadana y engañar a la gente, por lo que exigimos que todas las pedanías y barrios dispongan de las juntas que quieren. La formación de estos órganos de participación no es una «gracia» que el Sr. Mateos quiera elegir a quien le caiga mejor o peor, sino un derecho de los ciudadanos, que tiene que respetar sí o sí.
Por tanto, rechazamos cualquier tipo de «experiencia piloto» que el alcalde del PSOE pretenda controlar desde su despacho, porque estas Juntas Vecinales no van a estar sometidas al poder que el Sr. Mateos quiere arrogarse. Exigimos que se constituyan todas durante el mes de febrero, para que el bloque completo de Juntas pueda iniciar su trabajo en marzo, con el presupuesto que les corresponde, ya que el actual alcalde ya sabe perfectamente cuántos miembros componen cada una de las Juntas, y él se comprometió a que empezaran a funcionar el uno de enero de 2020, hace más de un año.
