La región de Murcia reúne casi una cuarta parte de las más de cien granjas de producción de caracoles que hay en España, al contar con 24 de estas instalaciones de helicicultura intensiva.
Lo dijo ayer la consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Adela Martínez-Cachá, en una visita a una de estas granjas en la pedanía lorquina de Doña Inés, en la que ha defendido que, como producción ganadera alternativa, la helicicultura «tiene un importante margen de crecimiento en el marco del nuevo modelo agrario europeo».
El consumo medio de caracoles en España se estima en 400 gramos por persona y año.
Lorca cuenta con una de las empresas más avanzadas a nivel nacional en este sector como es HELIFRUSA.
La empresa surgió en el año 1984 para comercializar caracoles vivos de tierra y fue el propio mercado quien seis años más tarde sugirió iniciar una aventura algo más arriesgada, conformando el actual negocio situado en Lorca y conocido como Helifrusa.
Esta empresa lorquina es el principal elaborador de caracol vivo de tierra a nivel nacional, líder en el mercado.
En la actualidad se comercializan básicamente tres variedades de caracol por ser las de mayor aceptación debido a las características de sabor y textura de su carne:
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VARIEDAD BLANQUILLO
Theba PisanaCaracol de pequeño tamaño, de concha blanda y carne suave, muy apreciado en nuestro país.
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VARIEDAD CABRILLA
Otala LacteaLa boca de su concha es negra y su carne es de textura suave. Abundante en el mediterráneo.
VARIEDAD BURGAO
Helix Aspersa
Es el de sabor más fuerte y de una textura compacta. Es el típico scargot francés.
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Helifrusa llevó sus productos al Taller de los Sentidos del salón de los alimentos de calidad
La calidad también llega al interior de la cáscara de un caracol. La firma murciana Helifrusa lo mostró en el reciente Salón de Gourmets de Madrid, donde expuso sus productos en el Taller de los Sentidos, un espacio concebido para la degustación.

Esta empresa ha conseguido extender la comercialización de este molusco a lo largo de todo el año. «Es un producto que le gusta a todo el mundo, todo el mundo lo conoce; lo que ocurre es que están acostumbrados a comprarlo vivo y a cocinarlo en casa», explica su gerente, Francisco Jódar Bermejo.
Jódar Bermejo explica que el caracol «ha sido toda la vida un producto que se comía porque había que comer, pero afortunadamente cada vez se va apreciando mucho más y a medida que nosotros le vamos cambiando la forma de presentarlo y demás va entrando más en el Gourmet».