El presunto asesino de la exconcejal de Lorca Alicia Zambrana alega que actuó en defensa propia.
El fiscal sostiene en su escrito de acusación provisional “se alteró, agarró de las patas un taburete de madera de los tres que había en el salón, fue hacia Alicia y, sin que ésta pudiera efectuar maniobra defensiva alguna ante lo inesperado del ataque, le golpeó con fuerza varias veces en el cráneo”.
El golpe que le proporciono a la víctima le causo una hemorragia interna en la cabeza llevándola a muerte.
Riaz se desplazo a Barcelona, desde donde se desplazó hasta Italia, donde fue detenido en abril del mismo año en la localidad de Limbiate, cerca de Milán.
Alicia Zambrana nació en Alicante aunque pasó muchos años en Lorca, donde fue concejal por el PSOE entre los años 1995 y 1997, tenía tres hijos para los que se les reclama una indemnización de 300.000 euros por los daños morales.
Riaz ha asegurado que la discusión comienzo cuando él le había preguntado por el chico con el que había comenzado a hablar a través de la aplicación Skype.
“Me dijo que no me importaba, se puso muy agresiva y empezó a gritarme. Fue a la cocina, cogió un cuchillo y me dijo que me iba a matar. Me intentó pinchar dos veces y yo cogí un taburete, que estaba a mi lado, y la golpeé para que soltara el cuchillo, pero no quería matarla”, ha relatado en la sala.
Mientras que la fiscalía, la acusación popular y la acusación particular, que representa a los hijos, califican los hechos como asesinato y delito de hurto, la defensa entiende que cometió homicidio imprudente y, en “legítima defensa”.