El trabajo de conservación y cuidado desarrollado por el Ayuntamiento junto con los vecinos para el mantenimiento de la Cala de Calnegre consigue un nuevo reconocimiento a nivel nacional.
La concejal de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Lorca, Satur Martínez, ha informado que la Cala de Calnegre ha renovado la Bandera Ecoplaya, una decisión que ha sido dada a conocer de forma oficial al Consistorio lorquino hace unos días. Se trata de un reconocimiento que ha sido posible gracias al compromiso continuo con la mejora de la calidad en este maravilloso enclave natural lorquino y las especiales aportaciones y compromiso de los vecinos de la zona.
La edil de Medio Ambiente ha indicado que la lorquina Cala de Calnegre consiguió este distintivo por primera vez en el año 2013, y hemos logrado revalidarlo en 2015, 2016, 2017 y 2018. Este premio es un reconocimiento al municipio por su trabajo por la calidad de sus playas desde el punto de vista ambiental, turístico y de sostenibilidad, con el objetivo de difundir sus esfuerzos, innovaciones y logros. Para la concesión de la Bandera Ecoplayas se tiene en cuenta una visión técnica global de todos los aspectos de la playa, como la arena, la calidad de las aguas, certificaciones especializadas, el control de la erosión, así como la normalización y accesibilidad para personas con movilidad reducida, entre otros factores. Se trata de una enseña que concede la Asociación Técnica para la Gestión de Residuos, Aseo Urbano y Medio Ambiente (Ategrus)”.
Satur Martínez ha destacado que existe una gran labor al respecto desarrollada por la Comisión de Gestión de Playas, que está formada por las Concejalías de Turismo, Medio Ambiente, Urbanismo, Sanidad, Emergencias, Aguas de Lorca y LIMUSA. Gracias a este trabajo colectivo, la costa lorquina ha alcanzado la excelencia en cuanto al mantenimiento de las mismas. Tenemos que estar orgullosos porque se reconozca a todos los niveles lo que ya sabíamos los lorquinos: que la Cala de Calnegre es un lugar excepcional para disfrutar del medio ambiente, del mar y del turismo.
Desde el Ayuntamiento confiamos en que estos galardones contribuyan a que los visitantes del levante español se acerquen a los kilómetros de la espléndida costa virgen lorquina y disfruten de un espacio único, que permite tener un turismo de calidad en las pedanías del sur del municipio. De hecho en 2018, y por segundo año consecutivo, la Bandera Azul ondea en el término municipal de Lorca, demostrando que su obtención no fue fruto de la casualidad sino la respuesta a la calidad del litoral y al trabajo realizado para cumplir con los parámetros necesarios para su concesión por la Fundación para la Educación Ambiental (FEE).
Playas para familias, mascotas y naturismo.
Satur Martínez ha recordado que la Ordenanza Municipal reguladora del correcto uso de las playas del litoral constituye el primer documento en tal sentido aprobado por parte de la administración local en la historia del municipio. Se trata de un texto que incluye, entre otras cuestiones, el establecimiento de zonas para la práctica de nudismo y para la presencia de mascotas. En el primero de los casos la cala designada es La Junquera, mientras que en el segundo ha sido Playa Larga. Estamos hablando de un documento flexible que hemos querido que sea “la Ordenanza de todos”, incorporando las aportaciones de los ciudadanos. El texto municipal ordena la utilización de las playas del litoral lorquino. El propio Ayuntamiento incorporó en esta Ordenanza la habilitación de espacios para la práctica de naturismo y presencia de mascotas, respetando los criterios de protección medioambiental establecidos para las playas lorquinas en su calidad de parque natural.
Lorca cuenta con una franja de litoral que se extiende a lo largo de 9 km integrados por 13 playas: Playa Larga, Cala Blanca, Playa de los Hierros, Cala Leña, Cala de la Gruta, Playa Junquera, Playa del Cuartel del Ciscar, Cala Honda, Playa de San Pedro, Playa del Siscal, Playa Baño de las Mujeres, Playa de Calnegre y Playa de Puntas de Calnegre.