Fulgencio Gil exige que se proceda de forma urgente al mantenimiento, limpieza y desbroce de la zona de la antigua carretera de Águilas a su paso por Purias.

El presidente del Partido Popular de Lorca, Fulgencio Gil, ha reclamado al ayuntamiento que proceda de forma urgente la ejecución de los trabajos de limpieza, desbroce y mantenimiento integral de la antigua carretera de Águilas a su paso por la pedanía de Purias, donde los vecinos nos han comunicado que existe una tremenda dejadez porque no se están llevando a cabo las tareas necesarias para que esta vía, que se ha convertido en los últimos años en una travesía de un núcleo poblacional cada vez más denso, cuente con la presencia que necesita el mantenimiento que los vecinos merecen.

Los propios vecinos nos han manifestado que no se han ejecutado los trabajos de limpieza y desbroce en la Vía Verde a su paso por Purias, que se han limitado solo a un tramo, dejando desatendido más de la mitad del trayecto de esta zona peatonal. Desde el Partido Popular consideramos necesario que, ya que los vecinos de Purias pagan más impuestos que antes, dejen de recibir un trato discriminatorio y de abandono, tal y como está sucediendo con la práctica totalidad de las pedanías de nuestro término municipal. Solo hace falta darse una vuelta por Purias para darse cuenta del grado de abandono que el actual gobierno local dispensa las diputaciones lorquinas. Ni hay presencia de Policía Local, ni limpieza, ni se realiza el más mínimo mantenimiento. No estamos hablando de grandes inversiones, sino simplemente de mantener lo que hay llevando a cabo las tareas ordinarias de limpieza y atención que se merece cualquier ciudadano que paga impuestos en Lorca.

En el caso concreto de la antigua carretera de Águilas, han sido los propios vecinos los que han trasladaron esta situación al Ayuntamiento en relación con la acumulación de restos vegetales que en cada episodio de lluvias terminan por obstruir los imbornales, impidiendo la correcta evacuación del agua. Por tanto, reclamamos que se proceda a la retirada de la pinocha que cae de los árboles existentes en esta carretera. Reclamamos, además, como ya hicimos en el pleno del mes pasado, que se proceda al desbroce y limpieza integral del carril bici, puesto que solo se ha llegado a una parte y se ha dejado abandonado el resto.

Los vecinos también nos han expuesto que existe una tremenda preocupación por el estado en que se encuentra el tramo de la Rambla de Biznaga a su paso bajo el Puente del Bao. Allí, como ya hemos denunciado y exigido en numerosas ocasiones, se encuentra estancada el agua, dando lugar a una acumulación de agua putrefacta. Se trata de un auténtico caldo de cultivo para todo tipo de insectos como mosquitos, moscas y el temido mosquito tigre. Cualquier ciudadano que pase y observe cómo se encuentra estancada esta agua, el olor que desprende y que presenta un color verde realmente repugnante, será consciente de que se necesita drenar el cauce para evitar un problema sanitario. Así las cosas, reclamamos que se tenga en cuenta esta cuestión y se proceda de forma urgente a vaciar este canal, construido en su momento por Aguas de Lorca, desinfectarlo y proceder también a la eliminación de todo el matorral que ha crecido en el propio cauce hormigonado de la rambla.

El presidente del PP lorquino ha realizado esta misma mañana un recorrido por diferentes enclaves de esta pedanía junto al presidente de la Asociación de Vecinos de Purias, Juan Sánchez, con quien ha tenido ocasión de conocer de primera mano e in situ las diferentes cuestiones que afectan a la pedanía con el objetivo de reivindicar que sean atendidas por parte del Ayuntamiento a la mayor brevedad posible.

Fulgencio Gil ha manifestado que las pedanías deberían haber sido objeto durante estos dos años de una atención adecuada por parte del gobierno socialista, pero las ha dejado abandonadas. Qué bien le hubieran venido a Purias que se hubieran invertido, por ejemplo, los 800.000 euros que el alcalde de los socialistas se ha gastado en comprar coches, o los 520.000 euros que ha costado el primer rescate de Limusa tras arruinarla, o los 400.000 euros que se gastan en poner cámaras de video a las tuberías, por lo hablar de los 9 millones de euros que se ingresaron de la sentencia contra Iberdrola y que se han gastado en no sabemos qué, y encima ahora tienen que devolver. Afortunadamente, el tiempo corre ya en favor de los lorquinos y este gobierno local tiene los días contados.