Fulgencio Gil se marca el reto de aprobar definitivamente el nuevo plan para el casco histórico en el primer pleno de la próxima legislatura.
Gil Jódar ha adelantado que el objetivo para el que se está trabajando desde el primer minuto es que pudiera ser presentado en el primer pleno de la legislatura que comenzará el próximo 17 de junio.
La recuperación del casco histórico constituye uno de los retos fundamentales que ha de afrontar Lorca como ciudad. Para ello hemos de dotarnos de instrumentos y herramientas administrativas con carácter versátil y práctico que permitan agilizar la realización de obras de reconstrucción y rehabilitación de inmuebles en la zona vieja de la ciudad. Hemos de ofrecer un impulso definitivo que revierta la situación.
El Ayuntamiento tiene que actuar como locomotora en este sentido, ofreciendo un ejemplo a seguir a empresarios, particulares, emprendedores e inversión privada en su conjunto. De hecho, el Consistorio Municipal cuenta con la obligación moral de servir de modelo al resto de la sociedad. En los próximos años los lorquinos tienen que comprobar que efectivamente su ayuntamiento ofrece muestras tangibles y concretas de que apuesta por su casco histórico. «De forma paralela a la aprobación definitiva del PEPRICH, la planificación con la que contamos contempla un cambio de rumbo en la empresa municipal de suelo y vivienda, Suvilor, para que centre su actividad en la recuperación del casco histórico, desde una nueva perspectiva orientada a la construcción de vivienda joven en varias manzanas de la zona. No confiamos en el modelo de viviendas en régimen de alquiler social, algo que ya venimos manifestando en los últimos años, puesto que consideramos un error repetir experiencias que han resultado negativas, como el antiguo barrio de San Fernando, que lamentablemente se terminaban convirtiendo en focos problemáticos. Se trata de un modelo que, de hecho, se abandonó en toda España.
Fulgencio Gil ha indicado, además, que la recuperación del casco histórico también requiere de una mejora de la seguridad ciudadana en sus calles, dotando a los vecinos de mayor vigilancia, así como de intensificar las tareas de limpieza y recogida de residuos. Estamos hablando de un reto ambicioso, que requerirá de tiempo, pero que debemos afrontar todos juntos como sociedad, un objetivo de municipio, que desde el Ayuntamiento estamos dispuestos a afrontar.