IU+Podemos+AV exigen cerrar de una vez por todas el calvario que sufren los vecinos de San Pedro afectados y desalojados por las obras del vial de los barrios altos.
El concejal del grupo municipal de IU+Podemos+AV, Pedro Sosa, comparecía esta mañana ante los medios de comunicación en el corazón del lorquino barrio de San Pedro, acompañado de un nutrido grupo de vecinos del mismo que sufren en sus humildes viviendas los efectos una obra pública, el vial de los barrios altos, inaugurada hace ya varios meses.
El garaje diáfano y a medio terminar de una vivienda del barrio es hoy la única solución habitacional que ha encontrado una familia de este barrio desde que hace meses le precintaron su vivienda, agrietada, desplazada y con riesgo grave de venirse abajo. En ese garaje, entre camas y enseres de cocina, hacen la vida 6 personas, cuatro adultos y dos niños, y ha sido allí desde donde el concejal de izquierdas y un numeroso grupo de vecinos han exigido respeto y atención urgente a un problema que se les ha ocasionado por la mala ejecución de una obra pública y del que ellos no tienen ninguna responsabilidad.
Sosa ha comenzado recordando que en julio de pasado año 2023, y a propuesta de su grupo político, se aprobó por unanimidad una iniciativa que él defendió en Pleno y en la que «el Ayuntamiento de Lorca se comprometía a atender, con carácter de urgencia y con la mayor de las diligencias posibles, habida cuenta la importancia de los derechos fundamentales en juego, todo el conjunto de problemas habitacionales que están surgiendo en el barrio de San Pedro y en otros barrios altos como consecuencia de las obras públicas que en ellos se desarrollan o de cualesquiera otros factores más evidentes o más subyacentes».
«Las grietas crecen en las viviendas de San Pedro, los meses pasan con familias desalojadas y viviendo en precario y el gobierno de Lorca se olvida de promesas y acuerdos», ha apuntado el edil de izquierdas antes de dar la palabra a una representación de los vecinos afectados
En el curso de la rueda de prensa han intervenido hasta tres vecinos para los que la ejecución del vial de los barrios altos ha supuesto un auténtico calvario que ha arruinado sus modestas viviendas, sin que hasta la fecha hayan obtenido otra cosa que promesas.
Esos vecinos que viven en precario, con limitaciones evidentes en los dos suministros esenciales -la luz y el agua potable- y con el miedo en el cuerpo por si se les cae encima la casa, han manifestado su disposición a iniciar un encierro en el Ayuntamiento de Lorca si no ven avances de inmediato en sus justas y legítimas reclamaciones.