LA ENTRADA A UNA BELLA PLAZA
Me gustaba encontrarme con este bonito espacio rectangular delimitado por algunas casonas y los dos grandes y singulares edificios que albergan la colegiata de San Patricio y el Ayuntamiento. El arco que une los dos cuerpos que configuran desde el siglo XVIII el Concejo, sirve de perfecto marco para mirar la esbelta torre campanario y debajo las elegantes salas capitulares que dejan en su parte baja el otro acceso con arco que viene desde la calle Cava.
Recuerdo que allí se celebraban los actos más importantes, también allí se montaba el mercado de los jueves. Ahora que se acerca la Semana Santa, subiremos el sábado de Pasión para disfrutar de la procesión de la Hermandad de La Curia que sale de esta plaza y en ella se recoge.
De día y de noche es un bello lugar que tiene mucho arte que mirar: las nobles piedras esculpidas de la Colegiata y su empinado carrerón, las grandes logias del Ayuntamiento y sus históricos blasones, la rejería de los balcones de la casa de los Potous, las dos originales arcadas que sirven de entrada y sentir que hubo y hay historia en cualquiera de sus rincones.