La plataforma de afectados del Consejero denunciará el macrocebadero en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo.
Los vecinos de El Consejero, afectados por la construcción de una granja para 2.000 cerdos en las inmediaciones del acueducto de los 17 arcos, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), continuarán las movilizaciones para tratar de evitar su apertura. Los componentes de la plataforma de afectados se reunieron anoche en asamblea para definir las próximas actuaciones de protesta ante la «pasividad», aseguran, de la Administración local.
«El Ayuntamiento nos sigue poniendo trabas para entregarnos la documentación que solicitamos para comprobar si el cebadero se ajusta a la legalidad, porque creemos que no», lamentó el portavoz de la plataforma, Agustín Aznar.
La instalación cuenta con los permisos municipales pero el portavoz vecinal cuestionó que se haya autorizado su edificación sobre el acuífero Alto Guadalentín «con la contaminación del agua por los purines» que podría generar. Además, el lugar donde se construye la granja se sitúa en una zona de especial protección para las aves (ZEPA) de las sierras de El Gigante-Pericay.
Alertan de los riesgos para el acuífero y exigen al Ayuntamiento la documentación del futuro cebadero
Aznar reclama a la Concejalía de Urbanismo tener acceso a los estudios previos de Patrimonio, de la Dirección General de Bienes Culturales y de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS).
La plataforma ha programado para el jueves la conferencia ‘Riesgos para la salud pública relacionados con la instalación de macrogranjas porcinas’, que pronunciará en el aula de cultura de la Fundación Cajamurcia la doctora Ángeles Prado, médico intensivista del Hospital General de Albacete. Los afectados continuarán con las movilizaciones y harán una «gran manifestación» para intentar frenar la apertura del cebadero que, «si nadie lo remedia, podría estar funcionando en menos de un mes». Aznar precisó que bajo lo arcos del monumento hidráulico pasan a diario una decena de camiones de gran tonelaje con material de obra y calculó que, cuando la granja esté en marcha, transitarán por la zona 600 vehículos pesados al año. También realizarán en las próximas semanas una replantación forestal en las inmediaciones de la ZEPA y del cebadero con más de 300 ejemplares de especies autóctonas como pino carrasco y acebuche. A esta actividad han invitado a distintas asociaciones y a los alumnos y maestros del colegio de El Consejero, que se ubica muy cerca del futuro cebadero.
La plataforma de afectados «no va a parar; iremos al Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo si hace falta». Aclaró que no se oponen a las granjas porcinas tradicionales «con las que hemos convivido siempre, somos conscientes de que vivimos en un entorno rural».