El presidente de la recientemente constituida Asociación de Vecinos del Casco Antiguo, Alejandro Peñas, ha expresado su preocupación por la posibilidad de que el barrio se convierta en un «gueto». Peñas ha declarado que, si bien los residentes se muestran «optimistas» ante los anuncios realizados por el Ayuntamiento, «se necesita algo más».
Una de las principales demandas del colectivo es el aumento de la seguridad en las calles. Para ello, proponen la creación de un cuartel de la Policía Local en el edificio del juzgado de la calle Padre Morote, una vez que este sea trasladado al Palacio de Justicia.
Peñas reconoce el plan del Ayuntamiento de instalar cámaras de seguridad, pero subraya que, si bien no considera que Lorca sea una ciudad insegura, existe una falta general de respeto por las normas de convivencia, y que esta medida podría ayudar a abordar el problema.
Las preocupaciones de la Asociación de Vecinos ponen de relieve la importancia de garantizar la seguridad y el bienestar de los residentes en todas las zonas de Lorca. Si bien iniciativas como las cámaras de seguridad y el aumento de la presencia policial pueden ser útiles, es fundamental abordar las causas subyacentes de la incivilidad y promover una cultura de respeto dentro de la comunidad para encontrar soluciones a largo plazo.
Además de las medidas propuestas por la Asociación de Vecinos, otras iniciativas que podrían considerarse incluyen:
- Mayor inversión en programas sociales y educativos: Esto podría ayudar a abordar las causas socioeconómicas de la delincuencia y la incivilidad, y proporcionar a los jóvenes alternativas positivas.
- Campañas de sensibilización: Estas campañas podrían ayudar a concienciar a los residentes sobre la importancia de la convivencia y el respeto mutuo.
- Promoción de la participación ciudadana: Implicar a los residentes en la toma de decisiones que afectan a su comunidad puede ayudar a generar un mayor sentido de pertenencia y responsabilidad.
- Fomento de la colaboración entre la policía y la comunidad: Esto puede ayudar a crear una relación de confianza y cooperación entre las fuerzas del orden y los residentes.
Es importante destacar que no existe una solución única para los problemas de seguridad ciudadana. Un enfoque integral que combine medidas preventivas, disuasorias y represivas, junto con la promoción de la cohesión social y el respeto mutuo, es fundamental para crear comunidades seguras y prósperas.
