HISTORIA DE LA BANDA MUNICIPAL DE MUSICA EN LORCA DESDE 1.927
Previo al nacimiento definitivo de la banda municipal, en 1927, sabemos de la existencia de agrupaciones musicales. Así, el Regimiento Provincial de Lorca nº33 tenía una banda propia, allá por 1824. A partir de 1852 las agrupaciones procesionales de Semana Santa dispondrán también de sus propias bandas de música.
Dos años después, en enero de 1854, Juan Casas Rojo, director de la banda de la Hermandad de Labradores, solicitaba al ayuntamiento el poder convertirse en municipal, lo que parece consiguió, de forma esporádica. En 1862 el ayuntamiento compraba uniformes para dicha banda. Al tiempo existía otra banda particular dirigida entonces por Serafín Campoy, el mismo que en 1865 dirigía la banda del Paso Encarnado. También contaban con agrupación musical los pasos Azul y Blanco.
Entre 1868 y 1878 la banda militar de esos años la dirigía Felipe Gayón, asistiendo a los actos festivos y culturales de dicho periodo. La banda municipal, al parecer con escasa representación, la dirigía Valentín Cererols, que deja el cargo en septiembre de 1876. En 1882 los lorquinos tienen que contratar a la banda de la Casa de la Misericordia, que vuelve en la Semana Santa de 1883, para unirse a las bandas propias.
En junio de 1885 el ayuntamiento acuerda que las bandas de música de la localidad toquen todas las noches, alternándose, en la plaza de la Constitución. Bien pudieran ser bandas de los pasos Blancos y Azul. Así parecen confirmarlo las noticias halladas relativas a 1899, cuando ambas agrupaciones musicales son dirigidas por Ginés González y Diego García Lizcano. Ambas habían acudido en mayo de 1892 a Murcia, a un festival benéfico realizado en la plaza de toros, con el fin de recaudar fondos para el manicomio. Este mismo año las bandas de Lorca acudían a la puesta de la primera piedra de la plaza de toros y a la inauguración del hotel de Lorca.
En 1908 nacía la Sociedad Santa Cecilia, a la que vemos en las fiestas del caserío de Lumbreras en mayo de 1909.
Era su Presidente Salvador Sánchez Carrasco, compartiendo protagonismo con Clemente Reverte. En enero de 1911 el ayuntamiento contrata a Pedro J. Jiménez Puertas como profesor de la banda municipal, pero esta desaparece en menos de doce meses, volviendo a tomar protagonismo las bandas ligadas a la Semana Santa.
En 1913 se encuentra dirigiendo la banda municipal José Mª Sánchez, pero la banda, como el Guadiana, vuelve a desaparecer, siendo referenciada entre 1916 y 1918 con Juan M. Navarro al frente. En 1919 dirigía la banda José Mª Guerrero.
El primer paso para acabar con el caos, aparición y desaparición de la banda municipal lo da, a fines de 1923, el concejal Moisés Ippólito Agustíni, proponiendo su creación (un contrasentido a tenor de lo visto) y una aportación anual para su mantenimiento de cuatro mil pesetas, comprando instrumental por valor de quince mil pesetas. No obstante, durante varios años más, será la banda del Regimiento de Infantería España nº46 la que amenice las fiestas locales, si bien dadas sus peticiones económicas se contratará después a la de Marina, de Cartagena.
Por fin, en octubre de 1926 daba los primeros pasos la definitiva banda municipal, retomando el nombre de Santa Cecilia, con una aportación municipal de ocho mil pesetas. Su Presidente efectivo era José Mª Casas Martínez. Enero de 1927 se aceptaban sus condiciones, por parte del ayuntamiento, naciendo en marzo la Academia de Música, en la que se inscribieron cerca de 120 alumnos, dirigidos por Eusebio Ribera, músico mayor del Regimiento. Mientras estos se formaban, el ayuntamiento siguió contratando a la banda del Regimiento para las diversas fiestas a lo largo del año. En abril de 1928 la nueva banda municipal daba su primer concierto, con cuarenta músicos de doce a dieciocho años.
Pero en noviembre de 1931 se decretaba su disolución, retomando de nuevo su actividad a finales de 1939, con Pedro J. Jiménez Puertas al frente. En octubre de 1942 animaba las fiestas de la Era Alta (Murcia). De 1944 a 1954 la dirigirá Miguel Gimeno Puchalt, sucedido por José Mateos Heredia, Lorenzo Galindo Caro (procedente de Cieza), Octavio Monserrat Chapaluna, (1955-1962), con él la banda gana el primer premio del Certamen de Bandas de Murcia de 1955. Antonio Martínez Nevado nacido en Caravaca, experto en bandas, ya que había dirigido las de Moratalla, Águilas, Cehegín, Lorca… y Rodrigo García Abenza ex director de las bandas de Lorquí, Ceutí y Bogarda, con él entraron a formar parte de la banda las primeras mujeres. Dirigió la banda de 1967 a 1975.
En 1975 tomaba posesión de la banda Rafael Rosell Cebrián, (1975-1983) nacido en Puig de Santa María, Valencia, tocando en diversas bandas y ganador de diversos premios, aumentando sus músicos a cincuenta.
Rafael Rosell fue director de la Banda Municipal entre 1975 y 1983 y entre sus logros destaca la creación de la escuela municipal de música de la que salieron muchos de los que ahora son profesores de Conservatorios y forman parte de bandas y orquestas. El maestro, además del mencionado Canto a Lorca, al que puso letra el poeta lorquino Pedro Guerrero, compuso varios himnos a cofradías lorquinas.
Entre los hitos de la Banda Municipal, durante la etapa en que el maestro Rosell fue su director, cabe mencionar la adaptación que realizó, en diciembre de 1979, del Concierto de Aranjuez para la Banda, y el estreno que tuvo lugar el día 27 de ese mes, teniendo como solista a Narciso Yepes .
Sería sucedido por Antonio Manzanera López que sigue siendo el actual director de la banda y de la escuela municipal hasta nuestros días.
Actuación de la Banda Municipal de Lorca en el 300 aniversario del Cuartel Mallorca 13 bajo la batuta de D. Rafael Rosell Cebrián.
Una asociación pide que el «Canto a Lorca» de Rosell sea declarado himno de la ciudad
Lorca, 5 nov (EFE).- La asociación «Amigos y alumnos de Rafael Rosell Cebrián» ha solicitado al ayuntamiento de Lorca que la obra «Canto a Lorca» del desaparecido músico valenciano y con letra del escritor Pedro Guerrero sea declarada himno oficial de la ciudad.
La solicitud, registrada esta semana en el ayuntamiento de la ciudad, cuenta con el aval de las opiniones que insignes músicos, como el guitarrista Narciso Yepes o el director de orquesta José Collado, realizaron en su día sobre la pieza de Rosell Cebrián.
La pieza, caída en el olvido durante años, fue interpretada el pasado abril en un concierto extraordinario que tuvo lugar en el recinto ferial de Santa Quiteria como homenaje póstumo al autor, que fue director de la banda municipal de música de la ciudad entre 1975 y 1983.
Se da la circunstancia de que Lorca ya cuenta desde 1994 con un himno oficial, la «Marcha de Ministriles», que data del último tercio del siglo XVIII, y que fue armonizada e instrumentada en 1994 por Antonio Manzanera, director de la Banda Municipal de Música
Precisamente entre los logros de Rosell Cebrián destaca la creación de la escuela municipal de música de Lorca, la mayor parte de cuyos alumnos son en la actualidad profesores o catedráticos en conservatorios e intérpretes de orquestas de reconocido prestigio.
El maestro compuso también varios de los himnos de las cofradías lorquinas de la Semana Santa, fue autor de la transcripción del cuatro concierto para piano y orquesta de Beethoven para banda y de la adaptación para el Concierto de Aranjuez de Rodrigo que interpretó en 1979 como solista el guitarrista lorquino Narciso Yepes.
El 20 de noviembre de ese año, el músico valenciano recibió, a título póstumo, el Diploma de Servicios Distinguidos a la Ciudad de Lorca.