El monasterio de Santa Ana y Santa Magdalena acoge estos días el encuentro anual de la federación de clarisas que integran dieciséis conventos de Cuenca, Albacete, Alicante, Murcia, Almería y Granada.
Se trata, según explicó ayer la abadesa Madre María Jesús, de una reunión anual en la que las monjas «renuevan su compromiso». Al encuentro han acudido 64 monjas clarisas que ayer, primera jornada de reunión, intercambiaron impresiones sobre la vida monacal de clausura, en la que viven todas ellas.
Una conferencia sobre la vida consagrada, a la que ha dedicado este año el papa Francisco, y una gymkana en el huerto del monasterio con pruebas en las que había que contestar sobre temas de franciscanismo, completaron el programa, que hoy continuará con un grupo de monjas algo más reducido.
Entre las participantes a la reunión el grupo más numeroso era de clarisas españolas, aunque también había representaciones de países como Guatemala, El Salvador, Francia, Kenia y Tanzania.