A principios del siglo XIV se funda la iglesia de San Jorge junto a la muralla, para lo cual se tuvieron que eliminar algunas de las casas precedentes. Entorno al nuevo edificio religioso se crean nuevas calles y lugares públicos, conocidos por los documentos como la Plaza de Adentro y el atrio de la iglesia de San Jorge, en cuyas inmediaciones se ubicaban las salas del Concejo en una de las torres de la puerta de Gil de Ricla.
En el siglo XV, en las inmediaciones del templo de San Jorge, se construyó la Casa del Obispo junto al Porche de San Jorge, posible entrada acodada de origen islámico que pudo persistir muy reformada, para facilitar la comunicación entre las parroquias de Santa María y San Jorge.