Entierros multitudinarios en la familia de los Condes de San Julián.
Hemos visto muchas veces unas fotos antiguas realizadas por el maestro fotógrafo Pedro Menchon de un entierro multitudinario celebrado en Lorca en 1.929, y otro posterior de su padre en 1.961, hoy vamos a detallar algo más de aquellos acontecimientos y sus protagonistas dentro de la familia de los Condes de San Julian.
Emilia Pérez de Meca Marín, tercera condesa de San Julián, se casó con el ingeniero Manuel Figueras de Vargas y Cocte.
No había transcurrido ni siquiera un año del enlace cuando éste falleció. En su afán de inmortalizar la memoria de su difunto marido encargó a un escultor de renombre un obra destinada al panteón familiar en el santuario patronal de la Virgen de las Huertas. El elegido fue el valenciano Mariano Benlliure que por aquel entonces tenía entre su clientela a familias aristocráticas de Madrid.
La pieza fue encargada con posteridad al año 1903, fecha en la que fallece el esposo de la condesa. El proyecto y su realización se llevó a cabo durante los cuatro años siguientes y a principios de 1908 es colocada en su lugar. 
Se cree que no fue dedicada finalmente al difunto conde dada la cercanía de su segundo enlace matrimonial con un primo suyo, Víctor Mellado y Pérez de Meca, en agosto de 1908.
Años después, serviría para recordar al joven Víctor Mellado Pérez de Meca, hijo de ambos, que falleció en junio de 1929. Su entierro tuvo una gran repercusión social y fue recogido por el fotógrafo Pedro Menchón.
El cuerpo del joven fue trasladado en un coche fúnebre cerrado y adornado con guirnaldas, al que acompañaban pajes y conductores vistiendo librea. Fue entonces cuando se colocó sobre la base del sarcófago la inscripción: «Hijo amadísimo ruega por nosotros. Víctor Mellado Pérez de Meca, nació el 16 de abril de 1916, subió al cielo santamente el 14 de junio de 1929».
En la madrugada del 26 de octubre de 1.961 fallece tras ser atropellado en Madrid, su padre Victor Mellado Pérez de Meca, Conde de San Julian tras su matrimonio con su prima la condesa.
Dos años más tarde el 25 de julio de 1.963, fallecería la propia Condesa un 25 de julio de 1.963.
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