Fulgencio Gil exige al Ministerio de Transición Ecológica que acelere la construcción de las presas de Nogalte, Béjar, Torrecilla y el canal para la rambla de Biznaga.
El alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, ha instado al Ministerio de Transición Ecológica a agilizar la construcción de las presas de laminación de Nogalte, Béjar y Torrecilla, así como las obras de encauzamiento de la rambla de Biznaga. Esta petición se realizó durante una reunión oficial con el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, y la directora general de Agua, María Dolores Pascual, en la que también participaron los concejales de Urbanismo, María Hernández, y Agua, Ángel Meca.
Gil expresó la necesidad urgente de estas infraestructuras, previstas en el Plan General frente a Inundaciones en el Alto Guadalentín, especialmente tras la riada de 2012. «No podemos seguir expuestos e indefensos ante la llegada de una DANA. Es solo cuestión de tiempo que enfrentemos episodios de inundaciones similares a los de 2012 en Lorca, 2019 en Murcia y recientemente en Valencia», advirtió el alcalde, subrayando la importancia de concienciar a las administraciones sobre esta problemática.
El alcalde enfatizó que el Ayuntamiento de Lorca está realizando todos los esfuerzos posibles para minimizar los daños de futuras inundaciones y seguirá insistiendo en la ejecución de estas obras. En la reunión, el Ministerio informó que los proyectos están en fase de estudios previos, tras lo cual se procederá a la redacción de informes para obtener las declaraciones de impacto ambiental mediante el trámite ordinario.
Además, Gil exigió la ejecución inmediata del plan de limpieza de cauces, anunciado hace cinco años sin que se haya realizado ninguna intervención. En particular, alertó sobre el estado del cauce del río Guadalentín entre la presa de Puentes y el casco urbano, donde la acumulación de maleza impide el paso del agua en caso de lluvias torrenciales, aumentando el riesgo para los ciudadanos.
La demanda de estas infraestructuras cuenta con el respaldo de diversos colectivos sociales, vecinales y empresariales, así como del Colegio Oficial de Arquitectos de la Región de Murcia, la Delegación Territorial del Colegio de Geógrafos y la Comunidad de Regantes de Lorca.
El alcalde trasladó al secretario de Estado la profunda preocupación del Ayuntamiento y de los vecinos por la tramitación de estos proyectos. Recordó los impactos devastadores de inundaciones históricas, como la riada de Santa Teresa en 1879, que causó 800 víctimas mortales, y la de 1973, que dejó 60 fallecidos y registró un caudal cercano a los 3.000 m3 por segundo. Estas catástrofes impulsaron la ejecución de infraestructuras clave, como la tercera presa de Puentes y el embalse de Valdeinfierno, y posteriormente, la construcción de la cuarta presa de Puentes, inaugurada en el año 2000.
El sistema de defensa contra inundaciones demostró su eficacia en la riada de San Wenceslao en 2012, evitando que el casco urbano de Lorca quedara anegado. No obstante, las zonas de Nogalte, Biznaga, La Torrecilla, Campillo y Purias sufrieron graves daños, lo que reafirmó la necesidad de ejecutar el Plan General de Defensa del Alto Guadalentín, que contempla la construcción de nuevas presas, el canal de la rambla de Biznaga y la limpieza de cauces.
En este contexto, el alcalde instó al Ministerio a reconsiderar su decisión de no ejecutar estas actuaciones esenciales y a reactivar los trámites para garantizar la protección del municipio ante futuras inundaciones. Criticó que estos proyectos fueran excluidos del Plan de Gestón de Riesgo de Inundaciones de la cuenca del Segura 2022/2027 y defendió que la seguridad de los ciudadanos no puede estar supeditada a criterios económicos.
Finalmente, Gil insistió en que la construcción de estas infraestructuras es vital para la seguridad y el bienestar de los habitantes de Lorca, Puerto Lumbreras y municipios cercanos, y reiteró el compromiso del Ayuntamiento en la defensa de los intereses de los afectados.