Entre las conocidas como iglesias altas, templos construidos en la zona del alcázar, cerca de la antigua fortificación de Lorca, se encuentra la de Santa María.
Hoy día solo podemos visitar sus restos puesto que junto a las de San Juan y San Pedro se trata de templos abandonados y casi totalmente derruidos.
Aunque sólo se conserven algunos elementos constructivos, como partes de arcos apuntados góticos o pilastras prismáticas, como bienes de la antigua iglesia de Santa María se guardan en la Colegiata de San Patricio y en la iglesia de San Mateo una cruz alzada de cristal de roca, sobredorada, y una magnífica custodia de plata, ambas piezas muestra notable de la orfebrería gótica.