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Lorca contará con la primera estación sísmica permanente de España, que permitirá conocer el comportamiento de la Falla de Alhama y su entorno

Lorca contará con la primera estación sísmica permanente de España, que permitirá conocer el comportamiento de la Falla de Alhama y su entorno El principal objetivo de esta actuación es analizar el comportamiento de esta Falla para comprender los mecanismos de generación de terremotos. Este plan está enmarcado en el proyecto de investigación interGEO en colaboración con la Facultad de Geología de la Universidad Complutense de Madrid y el Instituto Geográfico Nacional

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Lorca contará con la primera estación sísmica permanente de España, que permitirá conocer el comportamiento de la Falla de Alhama y su entorno.

El concejal de Desarrollo Rural del Ayuntamiento de Lorca, Ángel Meca, ha informado de que del 11 al 16 de Julio se está llevando a cabo la perforación de un sondeo de 40 m de profundidad similar al ya realizado el año pasado dentro de este mismo proyecto. En concreto, se está instalando en el paraje de La Torrecilla, situado a varios km al suroeste de Lorca.
Ángel Meca ha señalado que el objetivo principal es estudiar el comportamiento de la Falla de Alhama para detectar y localizar terremotos y temblores de muy baja magnitud, con el fin de entender el comportamiento mecánico de la falla y su entorno, así como analizar los mecanismos de generación de terremotos. Para ello, la instalación constará de dos sismógrafos que proporcionarán datos sobre la actividad sísmica y que contribuirán a mejorar los estudios de riesgo sísmico y su transferencia. Uno de ellos será instalado en el fondo del sondeo y otro a su pie con el objetivo de calibrar la señal. Hay que destacar que nuestro municipio se encuentra en una zona intermedia de falla y que los datos que aporte esta investigación serán de gran importancia, no sólo en el ámbito local, sino que situará a Lorca en el panorama internacional de estudios sísmicos.

Se pretende observar por parte de los expertos si existe una microsismicidad de fondo que pueda ser indicativa de un movimiento lento, técnicamente denominado “reptación o creep”, o si por el contrario la falla permanece “silenciosa” sísmicamente hablando.
El Edil de Desarrollo Rural ha destacado que este proyecto es el primer paso dentro de la implantación de un sistema de un monitoreo geológico y geofísico y que permitirá mejorar los diseños sismoresistentes en la Región. Además, la investigación InterGEO permite analizar las zonas intersegmento de grandes fallas para conocer su comportamiento y determinar su peligrosidad sísmica.

Ángel Meca ha explicado que este trabajo está siendo llevando a cabo por un equipo de Geólogos, Geofísicos y Geodestas, coordinados por el grupo de Tectónica Activa, Paleosismicidad y Riesgos Asociados de la Universidad Complutense de Madrid. Las zonas intermedias de la falla son aquellas en las que esta cambia de comportamiento y/o geometría, y por ello suelen ser regiones en las que los relieves asociados a su actividad cambian de morfología y dimensiones. Esto hace que los cursos fluviales mayores se encaucen en dichas zonas entre segmentos y se abran en los valles. Esto es especialmente claro en el Valle del Río Guadalentín, donde la variedad de las grandes poblaciones: Lorca, Totana, Alhama de Murcia, se localizan prácticamente encima de la traza de la falla de Alhama de Murcia (FAM), y a orillas de cauces fluviales que se abren paso al valle a través de zonas intersegmento de la FAM.

El trabajo de campo desarrollado el pasado año contempló la perforación con recuperación de testigo de 250 m de profundidad, atravesará la zona de falla con mayor grado de exhumación, es decir, la zona de falla que hace miles de años se localizaba cerca de la zona de la corteza donde se inician los seísmos en la zona. Gracias a esta labor, además de contar con una imagen de la falla, se han encontrado huellas de anteriores seísmos, en concreto del de 1674, que ha podido ser identificado por los investigadores sobre las trincheras existentes en el terreno pero cuya confirmación está pendiente de realizar una datación exacta mediante la prueba del Carbono 14. Dicho seísmo fue muy parecido al registrado en mayo de 2011, y del mismo se conservan “cicatrices” en edificios históricos como el Palacio de Guevara.

En la siguiente figura se muestra un esquema de situación del sondeo “FAMSIS-IGN”. Su localización se ha planificado a partir del sondeo de mayor profundidad realizado el pasado año. Gracias a la información proporcionada por aquel sondeo y las excavaciones auxiliares realizadas se ha establecido la estructura de la falla. Ésta está formada por una banda de más de 100 m de anchura de roca triturada a la que los geólogos denominan como harina de falla y que ha sido generada por la fracturación asociada a la repetición de miles de terremotos ocurridos en los últimos millones de año. Esta estructura ha permitido definir con precisión el punto donde se va a proceder a instalar el sismógrafo en profundidad.