La Virgen de los Dolores pudo desfilar por la carrera tras un parón obligado por la oportuna lluvia.
Ayer Viernes de Dolores fué un día grande para el Paso Azul, que presidió el primero de los desfiles bíblico-pasionales de la Semana Santa de Lorca, dando inicio desde las 20h, con salida oficial desde San Francisco.
Durante toda la tarde los dirigentes de los distintos pasos temían que la lluvia hiciera su aparición como así ocurrió sobre las 20:40h cuando desfilaba el Paso Morado por la presidencia, fué una tenue lluvia pero suficiente para preocupar a los miles de lorquinos y lorquinas que conocen muy bien el daño que produce tan preciado liquido para los preciados bordados que lucen nuestros pasos entre los que destacan los del trono de la Virgen de los Dolores que tuvo que ser mantenido bajo una carpa junto a San Mateo para evitar que se estropera con la lluvia.
La procesión tuvo que ser suspendida temporalmente durante más de media hora, hasta que las autoridades y la junta directiva azul decidieron que una vez finalizada la lluvia podian reiniciar el desfile de su paso para lucir un año más a su Virgen de los Dolores antes los miles de azules que la esperaban y resto de lorquinos y visitantes que aguantaron en los palcos. Otros muchos abandonaron sus localidades ante la falta de información oficial, pensando que la procesión no podría finalizar como esperaban, como así fué finalmente generando un hecho inédito en nuestra Semana Santa.
Foto Paso Azul
El escuadrón de caballería de la Guardia Civil abrió camino al trono de la Virgen de los Dolores, como ha acostumbra a hacer en los últimas ediciones de nuestra Semana Santa.
Los azules estrenaron nuevos paños del trono de la Virgen.
La procesión azul del viernes es completamente religiosa y este año acompañaron a la Virgen de los Dolores por primera vez los nuevos paños del trono, obra de Miguel García Peñarrubia que se han bordado durante 22 meses, dedicándoles 6 bordadoras un total de 12.500 horas de trabajo y empleándose 3’5 kilogramos de oro y 50.000 metros de seda natural.
Con la procesión de estos nuevos paños en el trono, vuelven a desfilar como estandartes las obras San Juan y Magdalena, creadas por Cayuela y catalogadas como BIC, habiéndose confeccionado 4 nuevas túnicas de portaestandartes.
