¡NO VAMOS A APRENDER NUNCA!
A quien corresponda 6 junio, 2017
Hoy, queridos amigos y lectores, me permito poneros un pequeño fragmento de mi nueva novela “El abismo en la frontera” que creo que describe bastante bien lo poco que hemos avanzado desde la época en la que está ambientada, que es el año 1465. Si acaso hemos ido a peor en la sinrazón del fanatismo abyecto y mortal que está regando las calles y los campos de varias partes de nuestro atribulado mundo de sangre inocentes. ¡Basta ya, basta ya!
“Se sentía inspirado, como no lo había estado en mucho tiempo; y, mientras, brotaba en él la emoción de retomar de nuevo el latigazo que todo lo incendia (como él llamaba a la sensación del fluir de palabras hermosas como un torrente), su esperanza en lo que había de venir fue acrecentándose.
Y le acudió a la mente uno de sus famosos poemas. Estos le habían dado un enorme juego entre sus súbditos, que apreciaban en gran manera las palabras que su señor juntaba y que no hablaban de guerra, de la que ya estaban más que bien servidos.
Aromas intensos envuelven la noche estrellada en la frontera
Todo lo que nos rodea se vuelve misterioso, y bello al mismo tiempo
El río que da la vida transcurre en su valle tranquilo hasta el origen
Descansamos como si algo de lo que vemos fuera nuestro
Y musulmanes y cristianos, cristianos y musulmanes, somos levedad en la noche
Hermanos que no se reconocen luchando contra hermanos que no se quieren
Llevados al desastre por un conductor suicida que acecha en la oscuridad.”