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Yacimiento arqueológico del Cerro de las Viñas en Coy

Coy disfruta de uno de los yacimientos arqueológicos más interesantes de Lorca y Murcia, el Cerro de las Viñas, un poblado argárico en altura que fue habitado en siglos posteriores por iberos y romanos. El período argárico pertenece a la Edad de los Metales, concretamente a la Edad del Bronce, momento en el cual la obtención de metales a través de hornos y aleaciones permitía la fábrica de herramientas.

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Yacimiento arqueológico del Cerro de las Viñas en Coy.

La historia de la región de Murcia no sólo hay que buscarla en la época musulmana, cuando toda esta zona era frecuente lugar de paso al ser frontera entre los reinos de Granada y de Castilla. Podemos ir incluso mucho más allá, gracias a la gran cantidad de restos y yacimientos que se encuentran jalonados en todo su territorio.

Hoy visitamos el Cerro de las Viñas, situado en la pequeña pedanía de Coy, muy cerquita de Lorca, al oeste de Murcia. Para llegar a Coy habría que tomar la carretera que une Lorca con Caravaca de la Cruz. A pocos kilómetros veréis una indicación hacia Coy, por lo que tomamos este nuevo camino y dentro del pueblo encontramos señalizaciones para llegar hasta el yacimiento.

Se trata de un yacimiento argárico que se remonta a la Edad del Bronce, aunque también fue utilizado por los romanos y los musulmanes. Apenas quedan algunos restos de las edificaciones, pero nos dejan ver que existían tanto casas cuadrangulares como ovaladas, rectangulares y circulares. Incluso en la zona norte del poblado aparecen restos de las murallas, con la base de las torres en las esquinas y hasta una pequeña ciudadela.

También pueden verse restos de enterramientos, especialmente en la parte sur del poblado. Es aquí donde se han hallado algunos elementos de cerámica, puntas de flechas, cuentas de collares, etc…

Lo curioso del caso es que este no es el único yacimiento encontrado en la zona de Lorca y sus alrededores. Además del Cerro de las Viñas tenemos el de Almendricos, la Salud, Cerro Negro, el Villar o Torrecilla.

PRIMEROS ASENTAMIENTOS

  La época de desarrollo de la cultura del Bronce es también el momento en el que las comunidades comienzan a asentarse en poblados, creando estructuras habitacionales, hogares y concediendo un sentido trascendental a la muerte, de aquí el hallazgo de necrópolis de este período. La importancia de este yacimiento promueve la celebración de un Campo Internacional de Arqueología. Los otros dos yacimientos de importancia en Coy son el de La Fuentecica, del período ibérico, y El Villar, de época romana.

Tanto en uno como en otro se hallaron restos muy importantes, una escultura conocida como el león de Coy y la del dios romano Mercurio, piezas que están expuestas en el Museo Arqueológico de Lorca.

 

EL POBLADO DE ALTURA «EL CERRO DE LAS VIÑAS» DE COY. LORCA, MURCIA.
CAMPAÑA DE EXCAVACIONES DE 1991.
Fuente: MARÍA MANUELA AYALA JUAN, SACRAMENTO JIMÉNEZ LORENTE, MARÍA BELÉN SÁNCHEZ GONZÁLEZ
LOCALIZACIÓN GEOGRÁFICA
El yacimiento se localiza al Sur de la población de Coy, en el denominado Cerro de las Viñas (913 m.), relieve en Cuesta que domina una extensa zona neógena-cuaternaria, bastante llana, con ligeras ondulaciones delimitada por una serie de alineaciones de dirección Norte-Noreste entre las que destacan las sierras de Ceperos y de Lavia, al Este se localizan las sierras de Pedro Ponce, Cambrón y Madroño y al Sur-Suroeste los cerros de Don Gonzalo y La Paca, quedando abierto al Noroeste a otras depresiones mucho más
amplias como la de Campo Coy.
Este cerro presenta una vertiente meridional, abrupta y de fuerte pendiente de 35°, regularizada por un talud y una vertiente septentrional, más suave y de menor pendiente de 20° con una serie de plataformas estructurales. La litología está formada por series calizas y margocalizas en su base, que pasan a series dolomíticas muy diaclasadas en la parte superior donde se ubicó la población prehistórica.
Entre las elevaciones mencionadas hay corredores intramontañosos y algunas zonas más llanas por donde discurren ramblas y barrancos, cultivados en su mayor parte, de marcado carácter endorréico. En las laderas destacan como formas de modelado glacis y conos aluviales y, en la depresión, la litología predominantemente margosa produciendo encharcamientos tras un periodo lluvioso o por surgencias naturales, en Coy existe una fuente al Norte de la población, igualmente nos confirmaron la existencia de una fuente en la ladera del cerro, actualmente inexistente. Son muy frecuentes los manantiales ya localizados, pero que, en la actualidad, la sobreexplotación de acuíferos y los periodos de sequía que se vienen registrando han originado un descenso notable de los niveles piezométricos con la sequía total de algunos de estos manantiales, como el caso anteriormente descrito.
ESTUDIO ARQUEOLÓGICO
https://ticumueliocrocarqmuseum.files.wordpress.com/2015/11/rcasaextecubier.jpg?w=350&h=200&crop=1Desde 1979 excavamos sistemáticamente en este cerro hasta 1985. Debido a su  emplazamiento geográfico podemos considerar que tenía una función estratégica y viaria.
Comunica la zona nororiental de Granada con la zona Norte de la Región Murciana, Bullas, Caravaca, Cehegín, Lorca y Totana, a través de pasos naturales. Igualmente une ambas regiones con la vecina del País Valenciano.
La inigualable situación geográfica de esta zona arqueológica explica su perduración  cultural desde el Neolítico, en El Cerro de las Viñas, hasta el siglo XII-XIII de forma prácticamente ininterrumpida. Posteriormente las poblaciones medievales se trasladan al cerro próximo de La Encantada.
A finales del siglo XVII se constata el poblamiento en el cerro adyacente, donde se documentan restos de poblamiento prehistórico correspondiente al Bronce Final, restos de urbanismo y materiales ergológicos tardorromanos con pervivencias hasta la actualidad.
Además de sus condiciones naturales, añade las fortificaciones calcolíticas con bastiones semicirculares adosados al exterior de la muralla sitos en la terraza inferior; en la terraza superior se encuentra la muralla correspondiente al ulterior momento argárico con torreones rectangulares adosados a los ángulos, son poco frecuentes en la comarca de Lorca, al igual que en toda la Región de Murcia, donde el porcentaje de poblados fortificados es muy escaso e inferior al cinco por ciento (AYALA JUAN, 1982, 23).
Un espacio de 2.125 m2 de la cima que queda encerrado por el lienzo murario construido en época argárica, donde se distribuyen las casas entre las cotas 930 – 910,3. El lienzo defensivo discurre por las vertientes septentrional, oriental y occidental, en los ángulos Noreste y Noroeste presenta bastiones rectangulares adosados al exterior.
Un lienzo murario construido en la cota 910,3 de época calcolítica presenta una longitud de unos 125 m. por 2,5 m. de anchura y en ella se puede observar claramente el acceso al poblado por la ladera Noreste, similar al poblado argárico de Zapata estudiado por Siret. Esta muralla debió tener bastiones adosados de los que hasta ahora tan sólo queda uno claramente visible de planta semicircular.
Durante las anteriores campañas se practicaron un total de cuarenta y un cortes en la cima, abarcando ampliamente toda la zona interior de la muralla incluyendo el bastión nororiental. En tres de ellos se excavó la zona exterior del lienzo murario.
En la terraza inferior se centró el trabajo en cinco cortes que abarcaron el tramo noroccidental de la muralla, quedando incluido el bastión exterior. Documentamos en la mayoría de ellos, el primer estrato corresponde al nivel de abandono y derrumbe de los muros, donde se entremezclan los útiles neolíticos, calcolíticos, argáricos, romanos y medievales.
Entre los restos cerámicos neolíticos hallados abundan paredes y bordes lisos aunque también, hemos localizado fragmentos con decoración acanalada, con pintura a la almagra y otras cubiertas totalmente con almagra en su interior y/o exterior. Fragmentos de cerámica lisa, incisa y correspondientes a la edad del cobre y vaso campaniforme. Bordes, carenas y cerámica pintada argárica. Numerosos fragmentos de cerámica con manganeso y a torno correspondiente al periodo medieval.
En cuanto a los restos pétreos hemos documentado un fragmento de pulsera/brazalete de caliza que significativamente podemos paralelizar con poblados andaluces y valencianos del neolítico inicial, siendo así, este cerro es el primer poblado neolítico de altura de la región de Murcia.