Fulgencio Gil denuncia que el gobierno local impide establecer ayudas fiscales en IBI, IAE y sello del coche y solo aplaza el cobro.
Los populares obtienen el respaldo unánime del Pleno para poder implantar una tarifa reducida industrial del agua y para bonificar el 95% de la tasa de expedición de documentos administrativos para autónomos, hosteleros y comerciantes.
El portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Lorca, Fulgencio Gil, ha calificado de «profundamente decepcionante» el resultado del pleno monográfico que hemos celebrado esta mañana en el Consistorio Municipal para abordar las medidas que las familias y el tejido productivo lorquino necesitan para hacer frente a la grave crisis aparejada al COVID-19. Tanto a nivel personal como político me gustaría poder decir otra cosa, pero lo de hoy ha sido «frustrante y estéril», y algunos se han centrado en «enjuagar» la gestión del gobierno de Pedro Sánchez en vez de ayudar a los lorquinos. No ha respondido en absoluto a las expectativas.
La sociedad lorquina, tanto las familias como empresarios, autónomos, PYMES y emprendedores en general, estaban esperando que el Ayuntamiento les lanzara un salvavidas, pero se les ha dado la espalda. No responde a lo que la ciudadanía y los colectivos del tejido productivo están reclamando (autónomos, hosteleros, comerciantes, empresarios, PYMES, oenegés.) Desde el PP solicitamos hace ya casi dos meses que se pusieran en marcha medidas económicas por parte del Ayuntamiento, y después de tanto tiempo, después de haber forzado la celebración de este pleno extraordinario, la única conclusión posible es que lo aprobado por el actual gobierno local no es, ni mucho menos, lo que los lorquinos necesitan.
Fulgencio Gil ha informado que la empecinamiento del actual gobierno local nos deja sin bonificaciones en el IBI y en el IAE, no han querido ni bonificar el 75% de la tasa a los vendedores del mercado, ni ampliar las coberturas del Bono Social a autónomos, hosteleros y comercios, y tampoco se bonifica el «sello del coche», entre otras cuestiones. Es evidente que el resultado del pleno es muy deficiente. Que todos los ciudadanos tengan claro que nosotros vamos a redoblar la actividad política para defender lo que la gente realmente precisa.
A un hostelero o comerciante no le sirve de nada que le den una «limosna» de 300 euros para «subvencionarle» la cuarta parte de los impuestos municipales que ya ha tenido que pagar durante el confinamiento. Lo que han hecho es asegurarse la recaudación de impuestos municipales, no ayudar a la gente. Además, han tenido que reconocer que el 25% de estas «propinas municipales» se lo llevará Hacienda, porque tributarán como ingreso, por lo que si la cantidad ya nace muy baja, encima se recorta más. Así, entre esto y los habituales trámites de asesoría, de los supuestos 300 euros de ayuda, sólo se van a recibir en realidad 125. Lo que, por ejemplo, los hosteleros esperan es que se flexibilicen ERES y ERTES, no que se les venga con «limosnas».
No se ha establecido ningún sistema de ayudas a las familias, que son las grandes olvidadas por el actual gobierno local. Estamos incrédulos de que después todo lo que estamos sufriendo, el actual gobierno local no se ha enterado de lo que está pasando. Ignoran totalmente la envergadura de la crisis que tenemos encima y condenan a la gente a un sistema de «caridad política, limosnas y propinas», presentando como supuesto «esfuerzo», el aplazamiento del pago de impuestos, lo que quiere decir que los autónomos tendrán que pagar todos sus impuestos, pero más tarde.
Las bonificaciones fiscales del Plan LORCA RESPONDE son serias y eficaces, y hubieran supuesto una ayuda media superior a los 3.500 euros para los comerciantes, hosteleros, autónomos y PYMES, con el objetivo de evitar la destrucción de puestos de trabajo, que es la piedra angular de cualquier política social. Ante esto, nos hemos encontrado un gobierno local intransigente, rechazando nuestras propuestas con excusas sin fundamento, tirando de «excusómetro» para defender lo indefendible.
No tenemos más remedio que señalar que al actual alcalde le ha faltado intención real de alcanzar un acuerdo. No han querido tampoco aceptar los consejos de quienes tenemos experiencia en la gestión de situaciones de emergencia social. Así, la intransigencia del gobierno local nos ha impedido lograr un acuerdo conjunto. Nosotros hemos puesto mucho de nuestra parte, llegando incluso a retirar algunas de nuestras medidas y a modificar otras. Hemos cedido en nuestras exigencias, manteniendo sólo las que la sociedad lorquina consideraba irrenunciables, pero han evidenciado que con el Pleno sólo querían «salvar la papeleta y pasar página».
Volveremos a insistir tanto en el pleno del Ayuntamiento como en la Asamblea Regional, Congreso de los Diputados y Senado del Reino de España, para que se aprueben las medidas que la ciudadanía lorquina necesita, no este producto fallido.