Las obras de recuperación de la iglesia de Santa María superan su ecuador con la incorporación de una estructura de cerchas de madera que sostendrá su nueva techumbre.
El Alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, junto al Concejal de Cultura, Agustín Llamas, han supervisado esta mañana los trabajos de rehabilitación y recuperación integral que se están desarrollando en la iglesia de Santa María, que ya han superado su ecuador, previendo su culminación definitiva para antes del próximo verano, si no surgen imprevistos de relevancia.
El Primer Edil ha indicado que las labores en ejecución se están centrando en estos momentos en atender las actuaciones más técnicas requeridas para la reparación de elementos que presentan mayor complejidad, siendo el ejemplo más destacado y notorio la colocación de una techumbre que proteja el interior del templo de las inclemencias meteorológicas, habida cuenta de que este inmueble fue objeto de saqueo e incendio durante la guerra civil, a consecuencia de los que terminó perdiendo de forma definitiva su techo, retablo y numerosos elementos estructurales.
Fulgencio Gil ha manifestado que hasta la fecha también se ha llevado a término el desmontaje de la torre del campanario, procediendo a dotarla de nuevos elementos que le otorgan una mayor seguridad estructural, implementando una batería de sujeciones basadas en la incorporación de tensores especiales para evitar la degradación que estaba sufriendo esta torre y que, tras los terremotos del año 2011, se había agravado hasta el extremo de comprometer muy seriamente su estabilidad. Gracias a estos trabajos ahora se cuenta con un elemento asegurado, pasando de una situación de casi ruina, a conformar un valor cultural que va a contribuir al impulso turístico y monumental de nuestra ciudad. De hecho el proyecto en marcha prevé la instalación de una nueva cornisa y su correspondiente balaustrada.
Estamos transformando un recurso de nuestro patrimonio histórico que estaba degradado, olvidado y que trasmitía dejadez y tristeza, en una verdadera joya para uso y disfrute de todos los lorquinos. Se trata de una actuación que se enmarca dentro del proyecto de una Lorca nueva que estamos sacando adelante entre todos los lorquinos. El ejemplo de nuestros barrios altos constituye al respecto un hito en cuanto a la mejora integral del municipio. En esta zona venimos invirtiendo millones de euros en renovación, mejora y recuperación de monumentos, calles, plazas, creación de nuevos miradores, que se suman al desarrollo de planes de intervención social y educativa para contribuir a la mejora de la calidad de vida de los lorquinos que residen en la zona.
El Alcalde ha indicado que los trabajos que se realizan en el interior del templo contemplan la conservación del solado existente junto a la instalación de nuevas piezas, una labor a la que hay que añadir la incorporación de una batería de 6 cerchas de madera de grandes dimensiones sobre las que descansará la techumbre del templo, que estará constituida por paneles también de madera e irá coronada con tejas acordes con el entorno en el que se ubica la iglesia, respetando la línea estética de este tipo de templos.
Fulgencio Gil ha subrayado que la recuperación del patrimonio monumental lorquino configura una batería de intervenciones de rehabilitación y puesta en valor que no tiene parangón en todo el país. Los lorquinos, con el apoyo de las administraciones públicas y el mecenazgo de diferentes empresas, hemos logrado lo que parecía imposible apenas unos segundos después de los seísmos de 2011, habida cuenta de los descomunales destrozos que produjo. Entre todos hemos hecho historia en Lorca. A día de hoy contamos con nuestro patrimonio recuperado, y estamos trabajando para que las inversiones continúen fluyendo, porque el proyecto que tenemos para nuestra Lorca Nueva no para.
El templo comenzó a ser construido en el siglo XV y fue terminado en el XVIII con la incorporación de la portada de estilo rococó. Con planta de cruz latina y dotada de pilares con collarines renacentistas está vinculada al estilo gótico catalán y de la misma todavía se conserva los pilares de la bóveda de crucería del altar mayor y algunos arcos apuntados.
Una vez restaurada la iglesia, desacralizada por su estado ruinoso será reconvertida en espacio cultural. Los trabajos que se abordaron en esta actuación se centraron en el desescombro y consolidación de las ruinas beneficiando a una superficie de 815 metros cuadrados incluyendo catas arqueológicas.
La última intervención que se realizó en la iglesia se remonta a 2010, cuando se invirtieron 800.000 euros. Esta actuación permitió consolidar el templo y logró que no cayera por los terremotos que padeció el municipio apenas unos meses después.
La intervención en Santa María ha incluido la realización de una serie de tareas arqueológicas importantes, entre las que destaca la datación de los elementos presentes en su interior y el análisis de una cripta destinada a enterramientos, una actividad muy extendida en las iglesias lorquinas de su época. Hemos de señalar que se han encontrado numerosos restos óseos humanos, fechados a partir del siglo XV.
El Ministerio de Fomento, a través de la Dirección General de Arquitectura, Vivienda y Suelo, es el encargado de ejecutar estas obras, cuya finalización está prevista, si no surgen imprevistos de relevancia, para el segundo trimestre del próximo año. Estamos hablando de una actuación que contempla una inversión de 1,2 millones de euros financiados íntegramente por el Ministerio de Fomento dentro del Programa de Rehabilitación Arquitectónica.
El templo, construido entre los siglos XVI y XVIII, tiene planta de cruz latina y está dotada de pilares con collarines renacentistas, esta iglesia está vinculada al estilo gótico catalán y de ella todavía se conservan los pilares de la bóveda de crucería del altar mayor y algunos arcos apuntados.
Santa María es uno de los uno de los tres templos católicos -junto a San Juan y San Pedro- en estado ruinoso situados en los barrios altos de la ciudad, en las estribaciones de la sierra sobre la que se levanta el castillo. El proyecto contempla la rehabilitación integral del inmueble para dotar a la ciudad de un equipamiento cultural actuando en dos espacios: la recuperación material y formal del edificio de la iglesia y la rehabilitación del espacio público circundante mediante la creación de una plaza pública de elevada calidad material y urbana”.
Las obras de recuperación de la Iglesia de Santa María y rehabilitación del entorno en Lorca se realizan en el marco del Programa de Rehabilitación del Patrimonio Arquitectónico, que consiste en la financiación de obras relevantes de rehabilitación del patrimonio arquitectónico español con los presupuestos propios del Ministerio. En estos casos Fomento financia las obras y ejerce como órgano de contratación de las mismas.
Con la recuperación de la iglesia de Santa María, el Ministerio de Fomento habrá intervenido en un total de cinco actuaciones en Lorca, con una aportación total en torno a los 3,7 M€: restauración de la Muralla, consolidación del Palacio de Guevara, restauración del Porche de San Antonio y las obras de emergencia en la iglesia de San Mateo.