Vecinos del edificio Los Almendros consensúan con el consorcio de seguros indemnizaciones «muy justas» para arreglar el edificio y evitan el juicio.
Los vecinos del edificio Los Almendros de Lorca, en situación de ruina como consecuencia de los terremotos de 2011, han alcanzado un acuerdo extrajudicial ´in extremis´ con el Consorcio de Compensación de Seguros (CCS) horas antes de que se celebrara el juicio por diferencias sobre la indemnización a percibir.
El edificio ruinoso, ubicado en el número 2 de la avenida de las Fuerzas Armadas tiene cuatro plantas, 32 viviendas y cinco bajos comerciales que aún están en pie pese a los graves daños del inmueble, que fue desalojado por orden de la Policía Local un mes después de los seísmos por riesgo de colapso estructural y permanece clausurado.
Los Almendros tuvo un primer diagnóstico de ruina económica, que los especialistas modificaron después por el de ruina técnica, lo que obligaba a su demolición, pero nadie quiso correr con los costes del derribo, ni el Consorcio ni las administraciones públicas.
Fuentes vecinales revelaron ayer que tras el examen de cinco peritos solo uno de ellos, el perteneciente al CCS, consideraba que no era necesario derribar el edificio para reconstruirlo de nuevo, por lo que la indemnización que correspondería a los propietarios por ruina económica era muy inferior a la de la ruina técnica que estimaba el resto de especialistas consultados.
La cuantía de la indemnización ha provocado un litigio entre la propiedad y el Consorcio que se ha prolongado durante un lustro y que ha concluido con un acuerdo extrajudicial horas antes de la celebración del juicio, bajo la advertencia del CCS de un recurso ante el Tribunal Supremo que podría haber dilatado el proceso cinco años más.
Por este motivo los vecinos han aceptado la oferta económica máxima que les ha ofrecido el CCS y que no ha trascendido, «resignándose a decir sí» a un dinero «muy justo» para culminar la obra y regresar a sus hogares en Los Almendros. En el edificio, muy deteriorado tras cinco años de abandono, aún puede verse una gran pancarta en la que puede leerse ´Desalojados tres años. El consorcio no paga. Soluciones, cuándo?´.