RECUERDOS DE LOS DULCES DE NAVIDAD
Pedro se había levantado temprano para ayudar a moldear los mantecados helados. La tarde anterior había estado viendo como su madre junto a su abuela, hacían la masa y como después la habían depositado dentro de un barreño de cerámica para dejarla reposar toda la noche cubierta con un paño.
Estaba sentado con el vaso rebosante de humeante «colacao» junto al barreño, esperando que su madre terminara de preparar al almuerzo de sus hermanos. La masa que había crecido se dejaba ver muy fría bajo el paño, de ahí que fueran llamados mantecados helados, entonces siente la tentación de meter el dedo en la masa, en ese momento aparece su madre por la puerta de la cocina con su blanco delantal, para ponerse a la faena extendiendo la masa hasta tener una fina plancha, que comienza a cortar en diagonal con el afilado cuchillo, le parece asombroso ver como se va abriendo a masa en porciones en forma de rombo. El ambiente está aromatizado de aceite, manteca y cascara de limón, y en la habitación contigua se escucha a la abuela explicarle a su hermano como se cortan los pliegos de papel haciendo flecos para envolver los bilbaos.
Su madre le apremia para que vaya a la cocina a recoger la llanda y cuando vuelve observa como su madre sonríe, mientras le dice que se esté quieta a su hija pequeña, la cual muy dispuesta había cogido el plato de la fina azúcar, está explicándole que esa faena se hará cuando los mantecados lleguen calentitos del vecino horno de Antonio.
Esa tarde ya estaban las dos fuentes colmadas de mantecados helados en el armario bajo del aparador, junto a los otros tradicionales mantecados con forma de estrella y de corazón, esperando a ser degustados para merendar o en las sobremesas de la Navidad, dispuestos sobre tapetes en las características bandejas.
Muchas familias han heredado la forma de elaborar los dulces por Navidad, pero el paso del tiempo va cambiando algunas cosas, como la forma de nombrar a los buenísimos mantecados helados ahora llamados en casi todos sitios como nevaditos.