3000 murcianos sufren un ictus cerebral anualmente, causas y prevención.
Sentir parálisis facial, perder la fuerza en las extremidades o tener visión borrosa son algunos de los signos de alarma que nos pueden indicar que estamos sufriendo un ictus o infarto cerebral. El ictus está considerada la primera causa de muerte en la mujer y la segunda a nivel general, una complicación que sufren cada día ocho murcianos, lo que supone cerca de 3.000 afectados cada año en la Región, pero que se puede prevenir en el 90 por ciento de los casos.
Los datos son concluyentes, ya que esta alteración en la llegada de sangre al cerebro provoca la muerte o una discapacidad grave en la mitad de las personas afectadas, muchos de los cuales se encuentran en edad laboral. Así lo indicó ayer la presidenta del Colegio de Farmacéuticos de la Región de Murcia, Isabel Tovar, que presentó la campaña que pondrán en marcha las oficinas de farmacia de la Comunidad con motivo de la celebración del Día Mundial del Ictus el próximo 29 de octubre para ayudar a prevenir esta enfermedad que afectará a una de cada seis personas a lo largo de su vida.
Tovar, que estuvo acompañada por los directores generales de Salud Pública y Asistencia Sanitaria de la Consejería, José Carlos Vicente y Roque Martínez, destacó que «los farmacéuticos tienen un papel destacado en la prevención de estos episodios» controlando los factores de riesgo, haciendo educación para la salud, un seguimiento del tratamiento del paciente y poniendo todos los medios posibles para evitar que se repita.
Ser fumador triplica el riesgo
El responsable de Salud Pública puso de relieve los resultados que se han logrado con esta labor preventiva, que ha permitido reducir a la mitad la tasa de fallecimientos desde el año 2000, cifra que ha bajado de los 74 muertes por cada 100.000 habitantes a 31,2 en el año 2015. Entre los hábitos que pueden hacer bajar las cifras de afectados se encuentra el practicar ejercicio de forma regular, llevar una alimentación saludable y reducir el consumo de alcohol y tabaco. En este caso informó de que el estudio EPIC, que han elaborado estudiando a más de 8.500 personas durante trece años, muestra que la incidencia del ictus es tres veces mayor entre los fumadores y se duplica en el caso de pacientes hipertensos.
Otro aspecto a tener en cuenta es la rapidez de respuesta de los servicios de emergencia cuando se produce un ictus, medida que también ha mejorado desde que se puso en marcha en el año 2008 en el Hospital Virgen de la Arrixaca el Código Ictus, programa que se extendió posteriormente al Hospital Santa Lucía de Cartagena. «El tiempo resulta fundamental porque aumenta la supervivencia de la persona y reduce las secuelas», dijo el director general de Asistencia Sanitaria, quien también incidió en que gracias a estos programas se ha ampliado del 1 al 10 por ciento el número de pacientes que se pueden beneficiar de un tratamiento fibrinolítico para destruir el coágulo.
Roque Martínez también explicó que el tiempo de respuesta de los servicios de emergencias está por debajo de los 15 minutos en estos casos y que resulta fundamental cuando se tienen los primeros síntomas avisar al 112, ya que el personal médico del 061 inicia el tratamiento del paciente durante el traslado en la propia ambulancia para reducir las secuelas. Respecto a la mortalidad informó de que «en apenas ocho años se ha reducido dos puntos pasados 30 días desde que se produce el ictus, de un 12 a un 10 por ciento, al igual que la mortalidad intrahospitalaria que se ha reducido de un 14 por ciento en el año 2008 a un 11 por ciento en 2016» gracias a una atención rápida y un tratamiento precoz de los pacientes afectados por un infarto cerebral.