LAVADERO MUNICIPAL.
En el año 1955 llegó el agua del Taibilla a Lorca y el útil y viejo lavadero municipal, ubicado junto a los Caños de Cerón y la Fuente del Oro, de precioso aire moruno, fue cayendo en desuso, aparte que ya estaba en franco deterioro estructural, a pesar de que en el año 1928 se habían hecho algunas reformas importantes.
Las familias ya hacían su colada en el domicilio en pilas de cemento o de piedra, las mas antiguas, y disfrutaban del agua corriente. En el año 1966, el Ayuntamiento acuerda construir una lonja municipal y eligen el espacio ocupado por el lavadero, que es demolido totalmente y el edificio de la nueva lonja duró pocos años, pues se trasladó a la diputación de La Hoya
El lavadero era amplio, luminoso y hermoso; estaba por debajo del nivel del suelo y constaba de varias balsas o pilones, que se llenaban por el agua que fluía constante de la Fuente del Oro, y era de piedra la zona donde se lavaba y estaba rodeada por arcos árabes que le daban suntuosidad y placentero encanto.
Al estar el lavadero junto al cauce del rio, el desagüe era sencillo y expeditivo. A la entrada existía un pabellón para vivienda de los guardas y para otros servicios necesarios, como el aparcamiento de los muchos carretones y carrillos en que se llevaba la ropa a lavar.
Tenía un piso alto en donde se tendía la ropa para su secado.
Este lavadero con su fachada de estilo hispanoárabe estaba considerado como el mejor de la provincia.
Las balsas tenían una profundidad de agua de unos cincuenta centímetros y cuando había poca gente, los niños nos bañábamos y el bondadoso guarda hacía la vista gorda.
Vamos quedando pocos de los que lo conocimos y lo vimos dando servicio a la población, pues hay que ser bastante mayor para haberlo visto en pie.
Lo recordamos con mucho cariño, porque era una joya del patrimonio lorquino.
/ Imagen del lavadero municipal tristemente desaparecido /.
